lunes, 28 de abril de 2014

Mujeres perfectas

Mi parte favorita del cuerpo son las piernas, luego el abdomen, le seguirían los brazos y por último la cara. De todas tengo una magnífica colección digna de admirarse, digna de un museo. Pero no cualquiera entiende mi gusto por las partes humanas, de hecho la mayoría lo encuentra hasta aberrante. Ellas por supuesto lo encuentran muy doloroso, ¿Te mencione que todas las piezas son femeninas? Siempre he encontrado catárticas todas sus curvas, su suavidad, las formas naturales y caprichosas que aparecen al contonearse.  

Lo primero es elegir a la mujer; me gustan alegres y de ojos grandes, que derrochen alegría y energía, me gustan sanas también. Suelo seguirlas por un día o dos y cuando el momento llega: en ese terreno baldío, en la cuadra que está sola o en la esquina sin luz…ahí ataco yo.

Siempre lloran y lloran y gritan y suplican no les haga nada malo. Y aunque yo trato de explicarles que están a punto de ser lo mejor que pueden ser en sus vidas o bueno…después de sus vidas, ellas simplemente no entienden, se muestran siempre renuentes a cooperar. Me muerden me patean, me rasguñan y hasta me escupen, pero eso no quita que yo haga mi trabajo con todo amor y cuidado porque después de todo se trata de mi sueño.

Porque  ¿Sabes? Toda esa pedaceria de partes humanas no es nada más porque sí. Estoy formando algo nuevo, algo que nunca se ha visto pero que siempre se ha buscado, estoy construyendo a las mujeres perfectas…y tú querida, al menos algunas partes de ti, contribuirán a este noble propósito ¡Magnifico, magnifico! ¿No te parece? Ah, pero no llores te prometo que en el cuerpo en el que te ponga quedarás hermosa. No, no trates de quitarte la mordaza, es inútil, además lo mejor todo es que mis mujeres no hablan ¡También les coso los labios! ¿Genial, verdad? ¡Genial! Completamente perfectas.

Aunque…tu opinión podría servirme en estos momentos, verás, tengo un problema: Una vez juntas todas las partes, ya que mis mujeres perfectas están creadas y hermosas, ellas…ellas parecen tristes y fúnebres. Sus ojos no brillan como antes con toda esa chispa, esa energía simplemente se les esfuma.


Ahora que lo sabes, tú no vas a ser así ¿Verdad? ¿Cuál crees que sea la causa? ¿No me quieres responder? No importa, creo…creo que de ahora en adelante las buscare más jóvenes, de unos 15 o 16 años. Tal vez así la alegría les dure más, aunque sea en partes. 

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